BacheCubano entrará a un tema más que actual, diríamos que caliente y ya cotidiano, la compra-venta de casas en Cuba. Como todos los cubanos sabemos en Cuba a pesar de los esfuerzos del gobierno existe aun un buen déficit de viviendas para suplir las demandas de la población, a pesar que la tasa de natalidad en la isla ha decrecido.
Muchos son los motivos porque la venta y la compra de inmuebles a nivel nacional se han convertido en uno de los mercados con más gama de ofertas de productos por decirlo de alguna manera. Unos porque salen de país y necesitan dinero, otro por acercase a mejores y mas céntricos lugares, sobretodo a La Habana, muchos porque quieren tener a la familia más cerca o más lejos, en fin, amplias justificaciones y motivos, que han puesto a la palabra permuta casi extinta.
A raíz de toda esta gama de productos inmobiliarios, han resurgidos los corredores de venta y compra y las famosas inmobiliaria privadas, con decenas de nombres comerciales, equipos de trabajo, hasta páginas web y promoción a más no poder, a nuestra opinión muy bien por ellos que optimizar sus servicios utilizando los nuevas tecnologías y sus derivados. Pero no todo es color de rosa, no todas son buenas gestoras, haciendo su trabajo, muchas son regionalistas y clasistas solo engrosan su carpetas de producto con casas de Playa, Plaza, Habana Vieja o Centro Habana, hablando del tema más concretamente en la capital cubana. ¿Acaso se les olvidó que La Habana tiene 15 municipios y que su objetivo es ser un “gestor” (intermediario) entre el comprador y el vendedor? Por otro lado algunas son algo desorganizadas, lentas y aunque abunden de buenas intenciones, no funcionan porque ellas mismas se incineran en sus propios errores empresariales. Otras quieren ganar casi más que el vendedor, donde muchas veces, promulgan la Ley de la Soga, atando a un contrato lleno de tecnicismos y compromisos a ese quien vende, sin tener ni siquiera un comprador en la mano o demorándose demasiado en sus gestiones como “gestor”, independientemente de la depresión del mercado inmobiliario en Cuba.
Analicemos ahora a los implicados directos, vendedores y compradores. En Cuba se vende más de lo que se compra y no siempre de lo que se compra lo vale realmente ya sea en más o menos cantidad. Para no hablar de nuestra crisis motivada por el bloqueo, la doble moneda, los errores, bla, bla, bla y ser repitente como cotorras, compradores y vendedores en ocasiones se sienten atrapados en un circulo vicioso del que no pueden salir, unos quieren vender en su precio y los otros quieren comprar con el que tienen en la mano, lo quieren y buscan y ahí empezó el primer asalto de la batalla campal. Muchos de los vendedores corren desesperados a la primera voz de estoy comprando o gestiono la compra de tu casa, pero esos que compran ya tienen sus planes y los que gestionan o cobran hasta el 10 % del precio (los famosos o mal afamados corredores de venta), o son unos estafadores o quizás como parte de una empresa privada no depende de ellos y son ellos los que pagan los platos rotos.
Ejemplos tenemos varios para ponerles, estimados lectores, pero no somos críticos de arte de las rivalidades, somos un blog, por lo que preferimos que sea usted quien nos ilumine con ejemplos reales. Quizás para muchos este artículo sea superficial, porque el tema le queda aun más tela por donde corta. Pues bien BacheCubano puso la tela, sea usted quien ponga la tijera y justos demos los cortes.
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